lunes, 10 de enero de 2011

Cuestión de trámites

Te sientan en una silla y te hacen una foto en una Polaroid gigante ¿Le gusta esta? Sí, es infinitamente mejor que la del DNI.

Te pasan a una habitación que en realidad es un pasillo. El doctor cubano me habla desde el extremo donde tiene la mesa. Yo en el otro extremo. Me va mostrando letras que recitar. Me pregunta por mis alergias y enfermedades, y concluye “por el momento ningún problema de salud no?”.

Me llevan a otra sala donde me hacen la foto buena con una webcam que está un palmo por debajo de mi cara. La primera foto me saca la papada en toda su inmensidad. En la siguiente saco el cuello como una tortuga.

Luego me dan unos manditos en forma de T y empiezo a jugar a un videojuego de esos de mi niñez en que solo se trata de mover un palito en horizontal. Me salgo varias veces de la carretera y suena una bocina de payaso que me avergüenza. Sorprendentemente saco un excelente con la mano izquierda y un notable alto con la derecha, no creo que mi pene opine lo mismo. Salgo aliviado del centro tras dedicar media hora de mi vida y 100 euros, como cualquier cliente del Riviera. Por fin he renovado mi carnet de conducir.

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