jueves, 31 de diciembre de 2009

Bon Any 2010!

"Llega el momento de recapitular..."
He estat pensant quina cançó podia penjar per dedicar-vos bon any i fer repàs de la década que avui acaba i inevitablement aquesta m'ha vingut al cap. L'hem ballat-saltat-cridat a pulmó lliure massa cops. Està al top ten de l'espiral intersimbòlica. Podria haver estat Kids, però no, trio "No cars go".
Enfants, let's go!

miércoles, 30 de diciembre de 2009

Un año mas

Mira que Mecano nunca me gustó especialmente, pero esta canción hay que escucharla estos días, ¿no? "Hacemos el balance de lo bueno y malo..."
Y el vídeo no tiene desperdicio, sobre todo el ventilador removiendo los ricitos de Nacho Cano y sus saltitos.

martes, 29 de diciembre de 2009

La "valentía" de tener a tu hijo en casa


Nuevamente recibimos la frustrante experiencia de una amiga que ha tenido a su bebe en el hospital. Y nuevamente se repite la historia:

Epidural a la fuerza ("para que no grite y no moleste a las otras habitaciones"), Oxitocina sin pedir permiso, tocamientos de personas desconocidas (incluidos estudiantes en prácticas), y finalmente la típica frase "el niño está sufriendo, hay que hacer cesarea", firma aquí, anestesia general y en 5 horas tienes a tu hijo, estás rajada y ya le han dado el biberón, con lo que tu lactancia materna será un lucha cuesta arriba.

Todo esto no lo vivimos nosotros. Nosotros tomamos nuestras propias decisiones, tuvimos un parto atendido cuando fue necesario pero solo para comprobar que todo fluía correctamente. Y fue la experiencia mas bonita de mi vida.

Nunca quise hacer proxelitismo con este tema, pero realmente me he cansado de ver la arrogancia de los profesionales médicos que tratan a las parturientas como enfermas.

Las realmente valientes son las que van al hospital. Nosotros fuimos cobardes y por primera vez en mi vida me siento orgulloso de ser cobarde.

PD: como me dijo alguien un día, si para cagar no vas al hospital, para tener un hijo tampoco hace falta.

sábado, 26 de diciembre de 2009

Santa María de la Flores - Jean Genet


Reconozco que desconocía su existencia, hasta que hace un par de meses decidí tomar un libro que tenía en la estanteria desde hace años.

Jean Genet me ha hipnotizado desde la primera página. Tiene una prosa rica, llena de detalles en las descripciones (en mi caso también dar la enorabuena al traductor/a). Un lenguaje poético y triste del tipo Onetti.

Jean Genet habla de lo mas bajo de la sociedad y de los mas bajo del ser humano, dandole una belleza que solo el mejor Bukowski o el mejor Celine han conseguido.

Putas, mariquitas, ladronzuelos, chulos, pero también jueces, ricachones corruptos, nobles. Todo ello cabe en este libro de Genet, que termina trágicamente, como no podía ocurrir de otra manera.

Os invito por cierto a leer su biografía. Una biografía que explica cuan autobiográfica, valga la redundancia, es su obra.

"Algunas mañanas, todos los hombres conocen, junto con el cansancio, un acceso de ternura que los hace empalmarse"

sábado, 19 de diciembre de 2009

feliz navidad

La navidad significa básicamente pasarme gran parte del día con una gran erección. Sea cual sea la hora del día a la que me siente delante de la tele, chicas en bragas con pinta de necesitar ser folladas por el primero que les dirija la palabra, se lanzan cantidades absurdas de perfume por el escote y se retuercen cachondisimas entre satenes y flores, todo esto mientras las canciones más sensuales suenan de fondo. Así que si después de tres o cuatro de estos anuncios no tengo unos impulsos irrefrenables de correr al lavabo a rociarme agua de colonia por la polla, es que algo anda mal. Que yo recuerde, desde crio los creativos han ido usado el temita del folleteo para animar la venta de perfumes y colonias, vamos ¿quién no ha fantaseado alguna vez con eyacular en el generoso escote de la perra que buscaba a Jack? Pero en el fondo aquellas de los 80’s eran mujeres bastante reales, enfundadas en cuero y al mando de motocicletas de gran cilindrada, pero no muy diferentes de las que se pueden encontrar en cualquier fiesta de divorciadas. Ahora todo ha cambiado, y las agencias de publicidad atacan a lo más hondo de nuestra psique, echan mano de seres mitológicos que están de vuelta de esos tíos musculados que desde la esquina más apartada del plano las observan y solo piensan en montarlas. Ellas son felices con las formas fálicas de sus frascos de cristal, con el roce de las plantas salvajes que se cruzan en su camino, con el deslizar de gotas perfumadas por su entrepierna, haciendo las veces de unos flujos vaginales que como seres dionisiacos que son, nunca llegaran a segregar. Y nosotros creemos en ellas, son nuestra nueva religión, en estas fechas señaladas esas chicas de lencería roja que desde nuestra flat screen nos invitan a pasar las largas y frías noches de navidad con una terrible erección se han convertido en lo más cercano que tenemos de la imagen de Dios.

jueves, 17 de diciembre de 2009

Visitas al final del Metro


A veces las compañías de low-cost nos hacen olvidar que en Barcelona hay muchas cosas todavía por descubrir. Ya había un libro de Vázquez-Montalban que hablaba de un ricachón que decidía cambiar de vida y en lugar de irse al Caribe se iba a la otra punta de la ciudad. Hace tiempo que llevo dandole vueltas a un proyecto que ahora os propongo. La cuestión sería la siguiente:

Quedar un domingo al mes e ir juntos al final de cada una de las líneas de metro. Una vez allí hariamos una visita cultural, tomariamos el vermut y unas tapas y vuelta a casa para documentar la visita.

La primera visita que os propongo es Fondo (final línea 1) el día 23 de enero. Seguiremos informando.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Primavera Club, dos tazas

Ayer nos pusimos las pilas y como histéricas fans adolescentes entramos en un Bikini desierto un cuarto de hora antes del inicio del concierto. Cuando los cuatro (ayer sí) componentes de Deer Tick salieron a escena enfundados (embutidos) en vestiditos de princesa Disney la sala se había llenado, y nosotros nos habíamos podido colocar en tercera fila. Lo de los vestiditos era porque el de ayer fue el último concierto de la gira. Yo le he comprado uno de Blancanieves a mi sobrina como el que llevaba Andrew Grant Tobiassen.
Más de lo mismo del viernes, pero electrificado y con los magníficos coros de los otros tres, la cosa ganó enteros. Me dejaron clavada en mi sitio, boquiabierta y sin aliento. Demasiada fuerza estrellándose contra mis oídos y mi estómago. Aunque las pintas que llevaban le restaran dramatismo a todo. Mola lo poco que parece que se toman en serio.
Después de eso, vete para apolo, intenta cenar en los bares atestados por el fútbol, y entra pronto a Chinarro, de nuevo como histéricos y de nuevo la sala vacía.
Antonio Luque es un grande que, como los chavales de Rhode Island, se toma en serio lo justo. Más sobrio (en las dos acepciones de la palabra) que en otras ocasiones, presentó su cancionero contando historietas, y también se ganó nuestra atención y aplausos.
Todo lo demás fue la banda sonora de una noche que acabó con Graham sin pinchar Viva la vida.
Quejas:
Las copas a 8€ en vaso de plástico son un timo, pero que a media noche suban a 8.50€ yo diría que es denunciable, ¿no? Como que a primera hora no te quieran vender cañas (a 4€) y solo sirvan medianas (a 4.50€).
¿Copiando las peores malas artes de Sinnamon?

sábado, 12 de diciembre de 2009

Primavera Club, so far, so good


Dos conciertos el jueves y cuatro ayer, y lo mejor, de largo, Deer Tick y The Soundtracks of Our Lives.
Los suecos tocaron el jueves y su entrada en escena fue apoteósica. Luego bajaron el ritmo para volver a ganarlo al final de la hora que tenían adjudicada, sin perder intensidad en ningún momento. Ni actitud. Cada cual con su estilo y su pose, el cantante como un Jesucristo bien alimentado, el guitarra como un Rolling espigado y saltarín, el teclista como un Nacho Cano (por los movimientos) en versión sueco guapo... Nunca les había visto en directo, y tenía esa espinita desde finales de los 90, cuando mi amigo Miguel me dejó un ep suyo. No tocaron mi favorita, Instant Repeater 99, de un disco del 96, y fue una pena que de Firmament Vacation, del mismo disco, solo tocaran cuatro acordes mientras se despedían.
Lo de Deer Tick fue una buena decisión tomada a tiempo. Laura dijo que no se los perdía, así que ayer antes de salir de trabajar me puse su myspace y en tres canciones decidí que había que ponerse las pilas y llegar a las seis treinta a Monasterio (sala infame, por cierto). El hombre venía solo, hoy lo veremos con la banda en bikini, y hablando de prendas mínimas, ¡¡¡se pasó la actuación en camiseta imperio, calzoncillos y calcetines!!! Abrumadora la intensidad de las canciones y la interpretación, con una voz que a ratos es Dylan o Springsteen y a ratos recuerda a Micah, pero que desde ya es la de John McCualey. Superfan.
Anecdotario:
- Comprarte una camiseta de Health, porque te gustan las camisetas pero no su música, con el cantante al lado, que también te gusta, y rodeada de tus amigos haciéndote pasar vergüenza, no tiene precio.
- Sensación de bucle al ir a por las pulseras y cruzarte a dj Coco tres días seguidos.
- El teclista y la bajista de Ladybug Transistor estaban en Deer Tick.
Quejas:
- Apolo y la 2 se quedan pequeños cuando ya no hay conciertos en otras salas.
- Cobrar las cañas a 4 € y las medianas a 4.50 € es un timo.

jueves, 10 de diciembre de 2009

Eres Friki?


A raiz del especial de El Jueves me he puesto a hacerme esta pregunta trascendente. Vayamos por partes siguiendo los rasgos fundamentales:

- Amor por los videosjuegos: no muy bien. Solo tuve relación con el Tetris y con el Space Invader. Bueno y con aquellos juegos de tenis con los palitos que se veía por la tele.

- Amor por programas de tele con baja audiencia: considero que el mejor reality de la historia fué "Confianza ciega" seguido de "contacto con tacto". voté por Ania en GH1. Me encantaba Xena. Me pasé años viendo Estadio2, especialidad tenis y golf.

-Hobbys extraños: tuve una época en que me gustaba el ganchillo.

- Cantantes preferidos: durante varios años fuí superfan de Victor Manuel, y en otra de Un Pingüino en mi ascensor, aunque me grupo fetiche es Los Toreros Muertos (asistí al concierto de despedida en Zeleste)

- Poco sexo con el sexo opuesto: desvirgado con mas de 20. Me pasé toda la adolescencia viendo la tele y jugando a basket.

Así que me doy el aprobado en frikismo. Y vosotros.

domingo, 6 de diciembre de 2009

Crítica de concierto: Franz Ferdinand


Descubrí a Franz Ferdinand en la pista de La Paloma en, seguramente, los momentos mas amargos y tristes de mi vida. Recuerdo como se encendían las luces al final de la sesión y sonaba atronador "Take me out" y como pegabamos votes los intersimbólicos. Recuerdo especialmente a Lineker. Y luego los ví al menos 2 veces mas: en Badalona y en el último FIB donde fueron los claros triunfadores.

La noche de ayer se inició en un chino tomando Estrellas y viendo el Madrid, donde el humo del tabaco me hizo salir a tomar el fresco por al menos media hora. Quiera diós que de una puta vez se prohiba ese vicio que nunca entendí.

Entramos media hroa antes y decidimos bajar a la pista, pero unos amables seguratas estaban barrando el paso porque ya estaba lleno (según su opinión que no tenía nada que ver con la realidad). Es la primera vez que veo este tipo de cosas, la pista se autorregula y nunca ha pasado nada grave en ningún concierto, al menos en los de puretas como era este.

Así que estuvimos todo el concierto en las escaleras, lo que al fin y al cabo fué un acierto pero se veía cojonudamente.

El concierto empezó 10 minutos tarde para desesperación de los fans que llenaban el pabellón (con un poquito de trampa porque habían avanzado el escenario). Tocaron uno tras otro los hits, dejando para la segunda parte otros temas menos conocidos. Todo ello, mas el cansancio propio de un padre, hizo que se me hicera largo el concierto.

La primera parte la finalizaron con una batucada tocando un batería a 8 manos. Los bises fueron aun mas soporiferos, con una canción que me recordaba a U2 y otra a LCD Soundsystem. Acabaron con 15 minutos de techno que aquello parecía el Scorpia y que los modernos no sabían bailar adecuadamente. Un detallazo que salieran al final a despedirse. Debería ser lo normal en todos los conciertos, teniendo en cuenta lo que costó la entrada.

Conclusión, el concierto muy bien, ellos cada vez tocan mejor, y de las canciones que os voy a contar. El único pero, la elección de la playlist. Hubiera preferido que se hubieran dejado alguna bala para el final y salir con el subidón.

Anecdotas: al Kapranos se le entendía bien tanto en castellano como en catalán. Tiró el micrófono al público de primera fila y las tontas no se sabían la letra (que coño hacéis ahí entonces?)

Final de fiesta en el centro comercial Magic con música de Merche de fondo, hablando del precio de las pistolas y celebrando los goles del Almeria. Se acabó el moderneo de un plumazo