domingo, 30 de octubre de 2011

In-Edit: Quiero una ferretería en Andalucía

Se ponían ciegos de tó. Que es lo bonico.

Esto no será una crónica objetiva (bueno, nunca lo son) ni tratará solo de un documental fantástico. Será también el relato que no hice en su día de la noche más loca y divertida que pasamos este verano en nuestras vacaciones en Almería, Margarita, Isabel y yo.

Escogí este documental porque el Inquilino y Cafeína la habían incluido en su selección, y aunque nunca he sido muy fan de los Clash, le eché un ojo a la sinopsis en la web del in-edit. Y vi esta foto:


El Jo. O sea, el de la derecha es Jo, el del Bar de Jo. El otro es Joe Strummer, el prota.

En el bar de Jo pasamos cinco horas locas y divertidas la única noche que salimos por Cabo de Gata. Un amigo me dijo que fuera a Los Escullos, que allí había una discoteca (el Chamán), una jaima (after, triángulo de las Bermudas según la recepcionista del hostal) y el bar de Jo (un bar de moteros).
Así que la noche del último viernes de agosto la pasamos allí. Bajamos desde Mojácar a Los Escullos a media tarde, soplaba el levante que daba disgusto, aun y así estuve un par de horas en la playa leyendo mientras mis compañeras de viaje alérgicas al sol sesteaban en el hostal. Los Escullos son dos casas, un hotel, un hostal, la disco, la jaima, un cámping y el bar de Jo. La chica del hostal me informó de la oferta de esa noche: "Bakala tour" en el Chamán y concierto rockero en el Jo. Y el triángulo en la jaima. Estaba claro: rockanrol.
A las 11 ya estábamos camino del Jo. Que tiene tela, porque te metes por caminos sin luz ni indicación alguna, siguiendo la intuición y la música. Un viejo punk te señala dónde aparcar en un descampado terroso. El bar estaba casi vacío cuando llegamos. Iconografía motera y sureña por todas partes, camareros que se las dan de duros y novias de camareros que fusilan con la mirada. Rincones con sofás que no tienen pulgas porque se las llevará el levante. Perretes y perro-caballo campando a sus anchas por el escenario donde los músicos están probando sonido.
Pasadas las 12 empezó el sarao. Un grupo de Valencia, Canapés, dos generaciones unidas por el rock'n'roll, el soul, el twist y el cachondeo. Aquello se fue calentando y al poco estábamos bailando lo que tocaran, en primera fila, como superfans. Entonces subió una niña a cantar. Digo niña porque dudo que tenga más de 22 años. Cantó y al bajar, no sé cómo, empezamos a hablar con ella y nos contó que llevaba más de 20 años pasando las vacaciones allí y que siempre iban al bar del Jo. Y no hablaba una palabra de castellano, estos ingleses no tienen remedio. Era simpática, pero más tarde, junto a su tío, un cowboy trasnochado que tocaba la guitarra y cantaba bastante decentemente, tomaron el escenario y estuvieron un buen rato cantando canciones country y blues que cortaron bastante el rollo, pero parecía que tenían inmunidad diplomática y cantaron mientras quisieron. Una señora rubia comentó que era su hija. Le dije que cantaba muy bien (bastante bien, hay que admitirlo). Cuando terminaron su show la cosa continuó con el desmadre rockanrolero festival del humor a cargo del que hasta entonces se había ocupado de la batería, inenarrable.
Pues sí, la niña a la que vimos actuar y con la que estuvimos charlando es la hija*, y la señora rubia, la viuda de Joe Strummer.

El documental narra las vivencias de Joe Strummer por Granada primero y enamorado del Cabo de Gata después, desde los 80 hasta su muerte en 2002. Los que le conocieron, y también su viuda, cuentan anécdotas mayormente hilarantes, que dibujan una persona afable, cariñosa, culta y sensible. Y borrachina, a qué negarlo, impredecible, espontánea, pero por encima de todo, con alegría de vivir.

Ingleses, gente prepará, alusionando.

Id a verla.

* un rato de búsqueda en la red después, creo que es la hijastra, pero igulamente, celebritiiiiiis!!!

5 comentarios:

Anna Blume dijo...

Almería engancha, y cuando te suelta o te sueltas...sientes un vacío extraño...

SantiMoskito dijo...

Y eso que no conocisteis a Fan Fan La Tulip, el dueño. Como le caigas un poco medio bien, se pasa toda la noche invitándote a chupitos de un brebaje de ron casero que preparan en la trastienda. Y por cada uno que te pone, otro para él, claro.
Y si te pones a hablar con el resto de piratas, camareros y clientes, alucinas con las historias de los personajes que por allí se mueven.
Eso sí hace unos años, era todavía más virgen y salvaje.
Teníais que haber terminado en la jaima-triángulo de las bermudas a ver amanecer sobre el mar, para rematar la noche.

Jolie Rouge!!!!!!!

Gwen Stacy dijo...

Siempre, todo, era mejor unos años antes. :-)

margarita dijo...

Ho has explicat molt bé!!!
Per cert Fan Fan era uno de los camareros,no el dueño!!

El Barón Rampante dijo...

No se si unos años antes era mejo, pero la probabilidad de encontrar una virgen a la que follarse (hacer el amor) en las dunas, era mayor.