lunes, 27 de agosto de 2007

Sarajevo


Este agosto he pasado 13 días en Croacia visitando ciudades maravillosamente conservadas (o reconstruidas) como Split, Dubrovnik o Zadar, islas mediterraneas de una belleza deslumbrante y vestigios romanos de gran valor histórico. Tras el tour decidimos cruzar la frontera bosnia y viajar hasta Sarajevo. En Croacia las marcas de la guerra, por lo menos las externas, nos resultaron totalmente imperceptibles, en cambio en Bosnia nos dimos cuenta que las heridas siguen abiertas nada más cruzar la frontera y no sólo por las marcas de metralla de muchos edificios.

Las maravillas de Croacia atraen a hordas de turistas en agosto, encuentran sol, playas y un patrimonio arquitéctonico y cultural inmenso, lo cuál está convirtiendo a este país en el nuevo destino turístico de moda. Sin embargo, en mi recuerdo me quedo con la modesta Sarajevo, en ella encontramos el calor humano que en la bella Croacia nos negaron.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Bienvenida MArgarita!qué bonita la foto!estuve hace un par de años en Croacia,me encantaron Split y Dubrovnik,pero sí,los y las croatas parecían bastantes fríos y bordes...
Intersimbólico sigue sumando km en viajes,jeje!

Anónimo dijo...

Yo he visitado 2 veces Croacia y 1 Bosnia. También estuve en Montenegro que es menos turístico y también muy bonito.

La primera vez que estuve viajé en tren de Zagreb a Split con 2 chicos que estaban haciendo la mili. Nos pasamos toda la noche comiendo, bebiendo y contandonos la vida. Fué uno de los viajes mas maravillosos de mi vida. Me di cuenta de todo lo que ha vivido esta gente.

Hace años estuve en una isla que se llama Hvar. Me encantó. Dormimos en casa de una beulita que nos hacía el café cada mañana. Supongo que ahora será como Lloret.

Lo mejor, mejor de Croacia: la belleza de sus mujeres. Mezcla eslava y mediterranea.

Yo estuve en Mostar y realmente me impresionó como todavía la mitad de los edificios estaban acribillados a balazos. Y los parques eran cementarerios llenos de chicos de mi misma edad que habían muerto con apenas 20 años.

margarita la saxofonista dijo...

Sí, los croatas deben haber perdido amabilidad al haberse vuelto tan turístico. Yo hice el viaje en tren de noche de Sarajevo a Zagreb y el revisor nos avisó 3 o 4 veces de que no nos durmieramos, y de que tuviéramos mucho cuidado, encima un chico bosnio nos avisó de que en esos trenes solían viajar presidiarios de permiso. Sólo nos faltó que un tipo sospechoso no parara de pasar por delante de nuestro compartimento para que nos diera un ataque de histeria.
Lo la belleza de las croatas es totalmente cierto, en cambio ellos son altos pero poco atractivos.