lunes, 12 de julio de 2010

Se acabó lo que se daba...

... pero ganamos el mundial!

De La Fortuna, con sus fumarolas y erupciones, nos fuimos el miércoles, creo, ya voy perdiendo la cuenta. Lo único que hicimos fue asustarnos con el volcán, ir de compras y bañarnos en unas "río-termas" en medio de una tormenta con rayos y truenos, con una familia de aulladores intentando echarnos de sus dominios y el volcán soltando erupciones al ladito. Vaya, que no podemos hacer una normal. Aun y así el "arremójate la tripa" fue genial. Son piscinitas hechas en un río de agua termal, calentita. Sí, sí, ya pensamos que un arrebato del volcán igual nos quedábamos allí como un huevo duro. Un paraíso para Boyscout.

De allí madrugón para ir a Puerto Viejo, llegamos a tiempo para sentarnos en un restaurante y ver como España eliminaba a Alemania mientras comíamos.
Por la tarde, como no, cayó la del pulpo. De nuestro pulpo, del pulpo Paul supimos en Punta Cahuita, un extremo del parque, nos lo contó el guía. Nuestro pulpo han sido los chaparrones que nos han caído cada tarde cuando hemos llegado a un nuevo destino. Más los de propina. Pues eso, llovió el día que llegamos, y con el madrugón, poco más que cenar hicimos.
Al día siguiente, ruta por el parque, festival de aulladores, mariposas morpho (la azul, es tan bonita...) y cangrejos, no sabéis lo divertido que puede ser ver cómo se van metiendo en sus agujericos a tu paso. El otro día, playa Cocles, paraíso caribeño.
Fiesta, la justa: happy hours de turno, imperiales heladas, y un par de homenajes gastronómicos inesperados. Pijolandia ha llegado a Jaironlandia.
Jairons, a patadas. El más guapo, el camarero de un bar, el resto, graciosos. Nos hemos reído mucho viendo cómo ligaban con inglesas de las que van al FIB. Pero no hemos frecuentado las discos en las que suelen salir de caza. Ni falta que hacía.

Hoy en San José nuestro único objetivo era ver el partido en un buen bar, y si hemos ganado, pues tanto mejor. San José es más feo que pegarle a un padre, por cierto.

Mañana a las 4.30 nos recogen para llevarnos al aeropuerto. Si no nos pasa nada, y cruzaremos los dedos porque hemos estado al borde del desastre muchas veces, el martes y trece a las 9 de la mañana aterrizaremos en el Prat.

¡Ya tengo ganas de veros!

2 comentarios:

margarita dijo...

Y nosotros a ti Gwen!!!

Anna Blume dijo...

Bon viatge i millor jet lag!!!