No hace mucho, andaba por casa haciendo cosillas mientras tenía la televisión puesta, de repente escuché Egdar Allan Poe y me volví atenta a ver qué era. Coincidía con el aniversario de su nacimiento, 19 de enero, contaban que desde hacía 60 años en su tumba, por su aniversario, alguien dejaba tres rosas rojas y media boetella de cognac y que este año era el primero que no había pasado......
Simplemente me conmovió, recordé mis primeras historias de Poe en mi niñez, aquellas que me atemorizaron, me sorprendieron, me angustiaron, me atraparon y esas películas de serie b los domingos por la tarde de Roger Corman con Vicent Price en la 2. No eran simples historias terroríficas sacadas del delirio de un borracho, Poe era frágil, apasionado, sensible, sufridor y con una visión psicológica profunda. Su obra dejaría huella, más tarde reflejada en la Literatura Simbolista Francesa, el Surrealismo y cómo no en la renovación de la Literatura Gótica. Escritores tan dispares como H.P. Lovecraft, Borgues, Kafka, Guy Maupassant, Julio Cortazar..y podría seguir, beberían de su influencia. Creo que te guste o no, nadie queda impasible después de leer algo de él, marcó profundamente la literatura de su momento.
Y si yo viviera en Baltimore cogería el relevo de esa persona que ya no debe estar y dejaría esas tres rosas rojas y media botella de cognac hasta que no pudiera volver nunca más.........
miércoles, 3 de febrero de 2010
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8 comentarios:
Podemos coger el relevo aunque no vivamos en Baltimore...un billete de avión, una vez al año,es suficiente, y un único equipaje: tres rosas rojas y media botella de cognac, y de regreso releer al maestro...
Que apasionada eres Walki...:)
¿Qué sería de la vida sin algo de pasión o sin cosas que te apasionen?
Pues muy triste y algo aburrida.
Si dejas la botella de cognac, avisame.
Ha sido con el único autor con el que he pasado muchisimo miedo leyendo a solas en casa.
Poe tiene ese duende.
Y viva la pasión!!
Lee a Lovecraft, ese sí que da pavor... tenía que parar de leer, cerrar el libro, respirar hondo, y volver a leer entre dedos, como cuando te tapas en el cine.
Leer al menos tres cuentos de Poe una vez en la vida debería ser obligatorio.
Yo tambièn recomiendo los poemas de Poe, menos conocidos... pero sorprendentes:-)
Pues yo cada vez que leo a Krugman o al del FMI,me cago de miedo...
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