Llamadme macarra, pero me encanta esta canción.
Escucho los primeros acordes, esos que reconoce cualquiera que fuera adolescente en 1987, a no ser que pasara unos años en una cápsula espacial, y me voy a ese verano del que pasé dos semanas en un pueblo de la sierra madrileña, rodeada de pijos salidos de una canción de Hombres G.
Por suerte no todo era Hombres G y Marta Sánchez, la radio escupía Sweet Child O'Mine cada tres canciones, intercalada con el Faith de George Michael.
Entré en una discoteca que no fuera la de mi pueblo por primera vez, me bebí mis primeros vodkalimón después de haber probado cosas infectas como licor43 con batido de vainilla y granadina, me pillé por el hermano mayor malote de la vecina de mi amiga y me quemé con el tubo de escape de una moto.
Sweet Child O'Mine es la banda sonora de ese verano y cuando la escucho el sol vuelve a brillar en una piscina de la meseta.
domingo, 15 de febrero de 2009
Memoria musical colectiva - I
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4 comentarios:
welcome to the jungle,we got funny games,we got everything you want...
la gallina de piel, tú!
A mi me gustaba todo el appetite for destruction. Un discazo. A partir de entonces mierda tras mierda.
Un par de años antes era fan de los hombre G. Lo reconozco
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