Primavera Sound 07: fin de fiesta tranquilo

Pues si, la organización programó un último día calmado. Long Blondes pegaban más a las 12 que a las 7, y programar Grizzly Bear a la 1.30 seguidos de múm a las 3 se explica mal. Bueno, como sea, el resultado fue una noche tranquila, donde el cansancio acumulado y el frío impidieron entrar en materia.
La avanzadilla que llegó a ver a Lond Blondes dicen que estuvieron bien. Los que llegamos a los Expertos Solynieve les teníamos ganas y no defraudaron. Genial la apertura con la banda sonora de Curro Jiménez y genial el fin de fiesta con "Talavera de la Reina de Inglaterra". La anécdota: J cabreado viendo que le habían puesto una lata de cerveza sin alcohol que casi acaba en la cabeza del roadie. El concierto fue menos distorsionado, menos "planetero" que el que habíamos visto en la dos en noviembre, claro, ya distorsionó el viernes, aunque en una canción se le fué la mano... Pero en general mantuvieron la esencia flamenquita y sureña que distingue el sonido de unos y otros.
De ahí nos asomamos a Architecture in Helsinki, pero no llegamos a bajar al escenario, hay demasiada gente y queremos ver a Patti Smith. No pude hacerme una idea de su propuesta porque el sonido no llegaba.
De Patti Smith sólo decir que quien tiene clase la tiene, que me impactó la fuerza que imprime a lo que canta, la calidad de la banda que le acompañaba y la actitud con la que se enfrenta al público. Cenamos durante su concierto, pero lo que oí me gustó, y mucho.
Cuando sonaban ya los últimos guitarrazos Iván y yo fuimos a ver qué tenía que ofrecer Damon Albarn con su nueva banda, y la verdad, poco. Jesús les dió el premio al concierto "show del humor" por las risas que se pegó viendo al batería "parece el Eddy Murphy en esa peli que se disfraza de viejo", a las instrumentistas (violines y demás, pero parecía que estaban allí por sus melenas rubias), los sombreritos a lo Oliver Twist y la poca gracia de las canciones: "como Tom Waits pero en aburrido".
Deambulando hacia otra parte escuchamos de lejos a Isis, cinco o seis tíos vestidos de negro atacando canciones metal-góticas que habrían hecho las delicias de Patricia.
Subimos a Sonic Youth, con la intención de verlo sentados en el cesped, y nos sentamos un rato, pero cuando empezó hubo que ponerse en pié. Para mí fue un concierto del que algunas canciones te suenan, otras para nada, pero te abstrae y antes de que te hayas dado cuenta llevas hora y media en plena tormenta de guitarras hirientes. Eso es calidad. Anécdota: el tipo sosteniendo un cartelito que rezaba "TEMAZO". Cachondo.
Esperamos que llegue la hora de Wilco bajando al cesped del ATP a escuchar un poco a Grizzly Bear. Lo dicho, hubiera estado mejor más tempranito, pero suena bien.
Wilco. Bueno, el nuevo disco carece de la intensidad de los dos anteriores, que no de su calidad. Pero queda a medio camino del intimismo y la calidez de los conciertos de Jeff Tweedy en solitario (como el que disfrutamos en el Primavera Club) y las descargas sonoras de la gira anterior (que disfrutamos en el Razz hace, ¿qué? ¿dos años y medio ya?). Un gran concierto de todas formas, hay quien le quiere dar el premio a concierto del festival, pero no convenció del todo a juzgar por el desfile de gente que se iba yendo. Si le hubieran subido un poco el volumen yo lo habría agradecido.
El final del concierto de Wilco fue el principio del fin. Ir de un escenario a otro, evitando las carpas, Battles pintaba bien, pero hubo quien insistió en bajar ya a bailar con Coco, así que hasta vimos los últimos acordes (o bases) de múm, acabamos los tíquets y esperamos que nos hicieran entrar en calor con unos bailoteos que se habían resistido toda la noche (frase: "estoy helado de no bailar"). Casi una horita aguantamos, y sí, entramos en calor. Buena sesión, muy popera, muy old school, pero no caía !!! y no tenía pinta de que fuera a caer, así que cuando Iván dijo que se retiraba, nos fuimos todos.
Un festival menos. A por el siguiente.
Las frases, una vez más, tendrán que esperar a Víctor. Pero recuerdo la de Jesús llegando a casa "ahora pienso en el FIB y me pongo enfermo".
Notas: el sonido de las carpas, se les fue de las manos. No es normal que en algunos momentos el estruendo llegara al Estrella Damm y se mezclara con Wilco, por no hablar del escenario Rockdelux, estando arriba era como estar en la carpa. Si hasta en el ATP se oyó de fondo mientras no empezó la sesión de Coco!
Famosos: Víctor se cruzó con Patti Smith, Johan (ex-MTV) me persiguió como siempre, mientras Bruno Sokolovich hacía lo propio con Neus.
Estilismo: para mí, este año, y sin duda, la tendencia es la capucha. Producto de la inclemencia meteorológica, eso sí, pero nunca había visto tanta caperucita, masculina y femenina, junta.